Millones de personas lo celebran cada año bajo la coordinación del Programa de las Naciones Unidas. Este 2025, la República de Corea es el país anfitrión con un objetivo urgente: eliminar la contaminación por plásticos y avanzar hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Cada 5 de junio, el mundo conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, una efeméride instaurada por las Naciones Unidas en 1972 durante la Conferencia de Estocolmo sobre el Medio Humano, primer gran encuentro internacional con el medio ambiente como eje central. Desde entonces, este día se convirtió en una de las principales plataformas globales de concientización y acción ambiental.

Organizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), se celebra cada año con un tema específico y un país anfitrión. En 2024, el tema fue “Restauración de tierras, desertificación y resiliencia a la sequía”, con Arabia Saudita como sede, en respuesta a una crisis que afecta a más de 3.200 millones de personas. Este 2025, la República de Corea es la anfitriona, con un enfoque centrado en poner fin a la contaminación por plásticos a nivel mundial. Actualmente, el mundo produce más de 430 millones de toneladas de plástico al año, de las cuales dos tercios corresponden a productos de vida corta que pronto se convierten en residuos, contaminando los océanos y, en muchos casos, ingresando a la cadena alimentaria humana.

Eliminar la contaminación por plásticos del planeta es una contribución clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluidos los relacionados con la acción climática, la producción y el consumo sostenibles, la protección de los mares y océanos, la restauración de ecosistemas y la conservación de la biodiversidad.

¿Por qué un día para el medio ambiente?
Esta fecha no es sólo simbólica. Surge como una llamada urgente a la acción frente a los crecientes desafíos ambientales: el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la contaminación del aire y del agua, y la degradación del suelo. A través de campañas, actividades comunitarias, movilizaciones y políticas públicas, este día se transforma cada año en una plataforma para sensibilizar, educar y movilizar a ciudadanos, gobiernos y empresas.
El planeta atraviesa una triple crisis ambiental, tal como señala el propio PNUMA: calentamiento global, pérdida de biodiversidad y contaminación. Abordar estos problemas no es una opción, sino una necesidad ineludible para garantizar la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras.

Un llamado a la acción colectiva
Organismos multilaterales, gobiernos locales, escuelas, empresas y organizaciones sociales de todo el mundo impulsan durante esta jornada actividades de plantación, limpiezas comunitarias, talleres, ferias ambientales, campañas de concientización y compromisos sostenibles. Cada pequeño gesto suma a una causa mayor: revertir el daño y proteger nuestro único hogar común.

Desde el LabDes, el Laboratorio de Desarrollo Sostenible de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, adherimos a la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente como una oportunidad para renovar el compromiso académico, institucional y ciudadano con los desafíos ambientales de nuestro tiempo. Reafirmamos que la sostenibilidad no es una meta aislada, sino una construcción colectiva, interdisciplinaria y de largo plazo

Fuentes: Environment Programme y LabDes